El mueble en la Roma antigua

Hoy, el mueble en la Roma antigua, un pueblo devastado por la erupción del volcán Vesubio, pero un pueblo que nos dejó un gran legado.

Unas líneas generales sobre la Roma antigua

En el año 79 después de Cristo, erupcionó el Vesubio quedando enterrada bajo las cenizas de aquel volcán, toda una ciudad romana; y debido a ello, aunque parece mentira, tenemos la posibilidad de reconstruir fielmente el mobiliario y la decoración, que normalmente se usaba en la Roma imperial.

El mueble en la Roma antigua

Como siempre pasa para conocer el mueble de época pasadas, tenemos que recurrir a lo que ha trascendido en el tiempo y en el caso de la época romana, hay cosas, elementos, mobiliarios que se pudieron rescatar y por lo tanto, se conservan y otros que no… como es el caso de los muebles de madera, que por la incandescencia de las cenizas del volcán, quedaron completamente destruidos (aunque en algunas zonas de Roma, este material resistió; por ejemplo en Herculano, se conserva un comercio con un desván interior, que era todo de madera)

Así que los muebles que conocemos de madera de la época romana, es como siempre, gracias a los relieves, pinturas y escritos que se encontraron de la época.

De las cenizas se pudieron salvar todas las piezas que eran de bronce, de otros metales y de piedra, que se usaban en los patios de las casas romanas (los patios eran llamados peristilos).

También se han encontrado, resistiendo a aquel cataclismo del volcán: mosaicos, pinturas en murales y numerosas estatuas.

Entonces, cómo era el mueble en la Roma antigua?

Gracias a todo lo encontrado y a todo lo que el Imperio romano trascendió y exportó, hacia otras ciudades vecinas, podemos hacernos una idea muy completa de cómo eran las costumbres y decoración, de aquel pueblo.

El estilo del mueble

Eran muebles de líneas sencillas, aunque algo menos ligeros que los griegos, pues los romanos presumían de la solidez de sus muebles, gracias a la pesadez.

Era un mueble no fácil de distinguir, por las distintas influencias; era un mueble muy “contaminado”, por así decirlo, de otras culturas tanto griegas, como etruscas.

Eran muebles muy decorados; mucho más recargados, que los muebles griegos.

Eran muebles muy torneados, muy barnizados y siempre llevaban incrustaciones de materiales preciosos; también, como no, usaban maderas preciosas provenientes de diferentes países y ellas, siempre estaban talladas y pintadas.

La talla era con motivos vegetales o animales.

El mueble se convierte en el símbolo de distinción y prestigio; lo miran más como lujo, que como una necesidad social.

También usaban muebles de bronce o de piedra caliza.

Tipos de muebles

Los romanos tenían la costumbre de comer reclinados, como etruscos y griegos; así que ellos tenían el “coenaculum” equivalente al kline helénico (ver post “el mueble en la Grecia antigua”).

Este mueble, estaba dentro del cubiculum, que era como nuestro salón actualmente.

El coenaculum, estaba apoyado sobre cuatro patas torneadas y donde uno se tendía, era una tabla muy delgada y estrecha o de cuero entrecruzado. El cabezal, situado en un extremo era curvado y a veces, en el otro extremo, también tenía otro cabezal; sobre la superficie, para que resultara mucho más cómodo, se ponían colchones y un gran número de cojines.

El cubiculum (recuerda, es lo que hoy día conocemos como salón), siempre se decoraba con tres de estos coenaculum, formando una “u” grande y en el espacio vacío central, se ponía una mesa cargada de comida.

Esta disposición, se llamaba “triclinios”.

En cuanto a las mesas, eran plegables con patas de bronce y la superficie de la mesa, era de mármol; habitualmente, los soportes verticales imitaban alas formas de animales: patas de caballo o de León… o figuras fantásticas, como esfinges aladas.

Este tipo de talla de forma zoomórfica, se encontraba sobre todo en los “trípodes”, que eran unos muebles de tres patas, usados como mesitas auxiliares para sostener lámparas y braseros, los cuales, se ponían en los rincones de las habitaciones para calentarla, en los fríos días de invierno.

Estos trípodes, eran de madera, de bronce y de piedra.

De sillas en el Imperio romano, usaban los escabeles fijos o plegables y otros taburetes, todo en diferentes estilos. También usaban butacas de respaldo alto y envolventes, realizadas en mimbre.

También usaban el armario, muebles de cajones y arcones, entre otros.

Qué más?

Los romanos daban mucha importancia a la decoración del hogar, costumbre heredada de otras culturas como la griega y etrusca.

Añadir que en salones, por ejemplo, existían elementos decorativos como: antorcheros, quemadores de perfumes y figuras decorativas, realizadas en materiales costosos, sobre todo en bronce, que en aquella época, era un material precioso.

Bueno, sin olvidarme de que los romanos le daban mucha importancia también, a decorar sus patios y tenían muebles de jardín, como la mesa redonda de piedra soportada sobre cuatro elementos leoninos.

Una pequeña conclusión

Poco puedo decir de conclusión, porque no quiero repetir siempre lo mismo, en cada post dedicado a la historia del mueble.

Solo decir que mucho le debemos a las culturas pasadas; la idea de casa que tenemos actualmente, es basada en la distribución de una casa romana… allí, en esta época, es donde parte las diferentes estancias del hogar… con variaciones, eso sí.

Pero fíjate qué curioso, que es aquí en esta época romana, donde se inicia la costumbre de decorar los patios o de usar un quemador de perfume, tal como hoy día es usado en muchos hogares.

Hasta lo más insignificante, parte de un periodo de antaño, incluso vivencias actuales… siempre es bueno conocer el origen de todo, como siempre digo, para valorar lo presente.

Por ahí hay una frase que dice: ”para atrás, ni para coger impulso”, pero realmente no estoy de acuerdo con ella… para poder valorar y analizar lo que tienes actualmente, ya sea material o inmaterial, hay que echar la vista atrás al pasado; no hay que huir de lo que ya se vivió, porque forma parte de tu aprendizaje, de lo que eres.

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